La inteligencia artificial y la educación infantil

La inteligencia artificial llego para quedarse y de eso estamos claros todos. Y la educación es uno de los sectores donde la IA estará más involucrada. Indaguemos sobre la participación de la IA en la educación infantil.

No podemos ignorar el hecho tan contundente de la inteligencia artificial, y en especial su impacto en el área educativa. Ahora bien, hablar sobre este punto álgido que nos compete como institución, va mucho más allá de señalar el avance hasta los momentos de esta herramienta tecnológica.

Es mucho más específico. Como es indagar que involucra a los seres humanos más pequeños y que requieren una mayor atención. Más que certezas se nos presentan mayores incertidumbres con respecto a la inteligencia artificial en la educación, específicamente en la infantil. Sin embargo, para este análisis partiremos del aspecto positivo hacia lo nuevo y tener una mentalidad abierta.

Imaginando el futuro educativo con la IA

Si nos vamos al futuro, ¿podemos visualizar cómo serán impartidas las clases? Y es que dentro de un poco menos de 10 años (por solo decir un tiempo y quizás tengamos que retractarnos de lo dicho) los niños no solo aprenderán a leer y escribir con la ayuda de la inteligencia artificial, sino que también podrán ser compañeros de juegos.

Probablemente podrán interactuar con máquinas no solo conversacionales y táctiles, sino con imágenes holográficas interactivas, que les despierten la curiosidad y les muestren mediante la diversión y el juego, el conocimiento y la experiencia del entorno.

Posiblemente lecciones adaptadas y personalizadas de acuerdo con las necesidades individuales y destrezas de cada niño, que es seguro mantendrá su atención y emoción ante la experiencia. Pero, ¿Eso será suficiente? ¿Se compartirá parte de la educación infantil con la IA y los maestros humanos?

Al imaginar un futuro (más cerca que lejos) es impactante. Aunque difícilmente la inteligencia artificial pueda superar o sustituir habilidades y emociones como por ejemplo, la creatividad, la curiosidad o la empatía. Y con un maestro tampoco sucederá, porque los sentimientos, la amabilidad, el contacto visual y físico: una sonrisa mágica, el abrazo o mirada comprensiva y cálida de un educador bondadoso y carismático, nunca podrán ser reemplazados por la inteligencia artificial.

La educación infantil frente a la inteligencia artificial

¿Qué retos presenta la educación con respecto a la IA? La educación infantil y la inteligencia artificial por lo pronto presentarán desafíos. Probablemente esta última apoyará a los niños no solo a jugar, sino que les ofrecerá una oportunidad del aprendizaje ilimitado.

Pero aquí cabe otra pregunta ¿otros niños tendrán esa misma posibilidad ante la IA? ¿Qué pasa con los niños que no cuenten con los mismos recursos? ¿Podrán acaso tener la opción de acceder a esta tecnología y conocimientos?

Como institución sabemos que la inteligencia artificial abrirá un mundo ante los ojos inocentes de un niño pequeño, desatando su potencialidad aún por descubrir. No obstante, habrá diferencias más profundas entre las actuales generaciones.

¿Qué sucederá con aquellos niños que no tengan la posibilidad de conocer esta tecnología? ¿Su nivel de aprendizaje se atrasará con respecto a otros que sí tenga acceso a la IA? Estas preguntas y más estarán encima de la mesa, sobre todo cuando estamos en un tiempo de acelerado cambio.

Por los momentos, es fundamental que independientemente de las circunstancias y situaciones que vivan los niños se tendrá que otorgar las mismas oportunidades de aprendizaje para todos en caso del acceso a una educación infantil impartida a través de la IA.

Consiguiendo un equilibrio

En este sentido, este será todo un reto, la clave es conseguir un justo balance. Esta demás decir que la IA es una ventaja valiosa si se encuentra aplicada por maestros preparados ante esta herramienta.

Esta más que claro que a partir de este momento los educadores tendrán un desafío adicional a todos los que ya poseen y es conocer la tecnología y saber usarla con el fin de enriquecer el aprendizaje y la experiencia de los niños.

Está bien abrazar lo nuevo, aceptar los cambios sin poner resistencia y sobre todo ajustarse a lo que las nuevas herramientas tecnológicas ofrecen. Pero, nunca como educadores podemos olvidar que aún con la inteligencia artificial los niños requieren de las interrelaciones con sus iguales, de tener tiempo para jugar y estimular su imaginación.

Beneficios que obtiene la educación a través de la IA

Existen riesgos pero también beneficios. En especial al lograr con éxito integrar la IA y la educación infantil, incluyendo a los maestros. No obstante, algunas de las ventajas que se presenta con el uso de la IA son:

Personalización del proceso educativo

• Mediante la inteligencia artificial se podrá adaptar los programas educativos y las actividades de acuerdo con las necesidades de cada niño.

Acceso en línea

• Al ingresar a la red con la debida seguridad; se puede ampliar y enriquecer el conocimiento, acelerar el aprendizaje y fomentar la investigación.

Retroalimentación

• Por medio de la inteligencia artificial la retroalimentación educativa es inmediata. Esto ayuda a acelerar el conocimiento y permitir que los maestros puedan ajustar los enfoques pedagógicos con mayor efectividad.

Riesgos que se deben controlar de la inteligencia artificial dentro de la educación infantil

La inteligencia artificial tiene definitivamente la potencialidad de transformar la educación tradicional. Personalizando el proceso de aprendizaje, incrementando la creatividad, la curiosidad y mejorando el rendimiento académico.

Esto es importante porque puede disminuir la deserción escolar, al hacer el aprendizaje más dinámico e interesante. La intención es potencializar al máximo el desarrollo integral de los niños. Sin embargo, así como hay beneficios existen desafíos dentro del proceso de enseñanza, entre estos riesgos están:

Seguridad de la información personal

• Por medio de la inteligencia artificial la retroalimentación e intercambio de las impresiones sociales, educativas, comunicacionales, etc., es inmediata. Esto ayuda a acelerar el proceso educativo y permitir que los maestros puedan ajustar distintos enfoques pedagógicos con efectividad.

No estamos en contra del avance de la tecnología. Pero si somos promotores y garantes de resguardar la seguridad personal de los niños, y en este caso la privacidad de sus datos es esencial.

Un punto álgido al que siempre se tendrá que poner mayor atención y cuidado. En este sentido, se debe garantizar la protección de los niños, niñas y adolescentes.

Conflictividad ética y moral

• Toda herramienta nueva y en especial las tecnológicas generan cuestionamientos y la IA no es la excepción. Ante ella se presentan cambios y a su vez estos producen dudas e inquietudes en cuanto a las decisiones que pudiese tomar la inteligencia artificial frente a los perjuicios, prejuicios y discriminación, por ejemplo.

Tomas de decisiones que son basadas en algoritmos y que en el caso del área educativa podría acarrear problemas. Debido a decisiones mal tomadas dentro de los procesos educativos.

Disminución en las relaciones sociales

• Si bien la IA puede mejorar aspectos de la vida y solucionar problemas, esta tecnología también puede contribuir al alejamiento entre personas, haciéndolas cada vez menos sociales. En el caso de los niños tiende a separarlo y aislarlo de su entorno y ambiente en el que se desenvuelven. En este sentido, es necesario determinar reglas y normativas para el uso prudencial de la IA como herramienta de apoyo educativo.

Los niños y maestros deben mantener el intercambio social, una premisa necesaria para un desarrollo infantil adecuado y para el mejoramiento profesional del docente.

Accesibilidad y equidad

• El acceso a esta tecnología es limitada. Como lo indicamos en el principio de este tema es un reto en cuanto a ¿qué posibilidades tendrán otros niños menos favorecidos para acceder a la IA? ¿tendrán igualdad de oportunidades? Para la aplicación en iguales condiciones se debe en este punto abordarlo con la seriedad que amerita.

Garantizar mejoras ya sean en programas, conocimientos y avances informáticos deben ser impartidos por igual. Es decir, un beneficio para todos en la misma medida.

Lugarve una institución pro tecnología

Lugarve es una institución tradicional y conservadora en cuanto a la protección y la seguridad que le ofrecemos al niño (a). Pero abiertos eso sí, a los nuevos tiempos. Aceptando los cambios y adecuándolos a nuestra organización de la mejor manera posible, si afectar a los niños y niñas.

El avance de la tecnología es un aspecto que nos emociona. Por lo que siempre Lugarve está dispuesto a extraer lo positivo que ofrece. Estamos preparados para aceptar y asumir las transformaciones pertinentes al respecto, pero aun así, para Lugarve los niños siempre serán lo primero.